domingo, 7 de mayo de 2017
Mal de Proyecto (actualizado)
Como una advertencia premonitoria al debate sobre los "guetos verticales" en Santiago de Chile, el libro de Jose Solís, en su ensayo sobre el "Mal de Proyecto" cuestiona las limitaciones del quehacer arquitectónico. Con una afirmación algo irónica del concepto central del trabajo arquitectónico, el proyecto. Por lo que se entiende, plantea que los arquitectos al concentrarse en el "proyecto", como labor y paradigma profesional, asumen la posibilidad de definir el futuro desde las formas dibujadas. Desatendiendo (y a veces despreciando) aspectos sociales, culturales, económicos, geográficos, que condicionan la actividad arquitectónica (como sucede en éstas apretadas torres residenciales). Debido a enfocarse en lo que se puede trazar (y disfrutar); la composición de las figuras, la sombra de los volúmenes, la difusión de las imágenes (y a veces también, la comidilla gremial). Solís desarrolla esta perspectiva desde raíces filosóficas y fenomenológicas, para impulsarla a un horizonte político. Considerando lo político, mas allá del dilema coyuntural o ideológico, su sentido de estructura social, que indudablemente subyace en toda actividad.
Con un discurso algo hermético y bibliográfico, y ciertamente alejado de la práctica regular, el autor plantea una visión radical y discrepante en la arquitectura contemporánea. Elaborando una crítica de-constructivista de profundos supuestos profesionales y educativos, que merecen una mirada renovada, para adecuarse a los cambios culturales, y al retrasado rol social y material de la arquitectura en la vida actual. Este enfoque es útil, no solo por el relato que emerge, sino también por la capacidad de refundar y ampliar la mirada disciplinar. Pero evidentemente, requiere arribar a la realidad laboral y operativa de la arquitectura para demostrar la potencialidad de su propuesta. En eso queda pendiente el texto, quizás lo sugiere en su propia trayectoria personal y las iniciativas académicas que impulsa, pero también debería revisar las acciones públicas o mecanismos de participación que expresen esta postura.
En todo caso, el ensayo de José Solis ciertamente es un planteamiento distinto y atrevido en el pensamiento arquitectónico actual; con una contribución para la reflexión y comprensión de la realidad, como también de proyección del rol profesional y disciplinar. Por lo que se agradece y recomienda este texto, como una revisión relevante y controvertida de la actividad arquitectónica.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario